EL CHORRILLERO TV
Teresita Llanos: “Me comprometí con los vecinos a trabajar para sacar a Candelaria de este estado de abandono que sufre”
Es candidata a intendenta de Candelaria por el sublema Avanzar, dentro de Cambia San Luis.
-Daniel Miranda: Trabajaste durante mucho tiempo en la Municipalidad que hizo que seas conocida y una referencia para los vecinos ¿Cómo fue tu paso por el municipio?
-Teresita Llanos: trabajé durante 22 años. En el año 2015, en medio de una campaña política, y por algunas idas y venidas y por un maltrato psicológico, persecución política, por parte de la intendenta actual, que en ese momento era diputada provincial. Por entonces era la esposa del intendente y llegó a un punto en que ya no podíamos seguir aguantando y decidí poner un punto final, y el 31 de agosto del 2015 presenté con carácter indeclinable mi renuncia al cargo.
En ese momento yo me desempeñaba en el área de Cultura, en el área eventos culturales. Todo pasaba por mí. Lo que eran actos escolares, festivales, en definitiva yo estaba en esa área, pero abarcaba mucho más que eso.
-Te gusta el servicio público…
-Exacto. A mí me encantaba el trabajo. Para mí era un placer desempeñarme ahí, hacer el trabajo me gustaba. Pienso que uno en esa área debe tener carisma, tiene que ser sensible, hay muchas cosas que, cuando se te presentan son lindas y hay que tener cintura para tratarlos y la gente se merece que vos te pongas en el lugar de ellos.
-En Candelaria vemos que los integrantes de una familia alternan en el poder. En la actualidad la intendenta, que no puede reelegirse porque ya agotó los dos pedidos consecutivos que prevé la Constitución Provincial, se postula como diputada provincial, un hijo se postula como intendente y una hija es actualmente concejal ¿Cómo ven esto los vecinos?
-En el año ’95 es cuando empieza la era de los Casas, como actualmente se dice. Fernando Casas comienza el gobierno como intendente con dos períodos. Después ella, la esposa, se presenta por un período. Después se vuelve a presentar Fernando y ella se postula como diputada. Fernando estuvo dos períodos más. O sea, se iban alternando. Él como intendente y ella como diputada. Fernando diputado y ella intendente. Hasta que después se rompe la familia Casas-Leyes y ella sigue otro período como intendenta cuando yo asumo también como concejal. Ahí ella presenta a su hija como candidata que está ahora como concejal, Graciela. Y el año pasado, el 10 de diciembre, al tener mayoría en el Concejo Deliberante ella impone a su hija como presidente del cuerpo.
La impone porque, en definitiva, en el Concejo Deliberante de Candelaria somos cuatro. Tres del oficialismo y uno de la oposición. Entonces cuando vamos a elegir las autoridades ellos ya van hablando. Se autoproclaman presidente, vicepresidente y secretario, ya van con el paquete listo.
-¿Cuál es la realidad de Candelaria? Porque pude ver que, a pocas cuadras de la plaza principal de la localidad, todavía hay viviendas con pisos de tierra…
-En la actualidad es poco lo que ha crecido. Si me decís viviendas con piso de tierra, sí todavía siguen existiendo. También hay calles de tierra y ahora hace pocos meses se hicieron algunas cuadras de hormigonado, que están muy mal porque no tienen un buen nivel, cuando llueve en la esquina de la plaza, por la calle Pringles, todos reniegan queda el agua acumulada. En el barrio Los Aromos hicieron un asfalto en una oportunidad que lo terminaron por levantar. Hicieron ahora un hormigonado que lamentablemente quedó pésimo porque cuando pasás parece que te metes a un pozo. Y están haciendo veredas, malísimo, pésimo. Candelaria demográficamente ha crecido pero si vamos a ver el tema de construcción de viviendas, poco.
-¿Cuáles son los dolores que los vecinos de Candelaria te transmiten?
-Lo primero que te demandan es falta de trabajo. Y segundo, viviendas. Hay familias que piden. Se donaron muchos terrenos de la municipalidad y hay unos loteos que se hicieron en los terrenos de lo que era de la estación del ferrocarril Manuel Belgrano. Ahí está el famoso barrio Hipódromo y después el Hipódromo Anexo, con muchos terrenos y en los que no construyeron nada. En las resoluciones había un punto donde decía que no se podía venderlos. Bueno, siempre está la picardía, se decía que si vos renunciaste a eso cedías el terreno, pero en realidad los vendían y hay varios terrenos en los que no construyeron. Nosotros no les pedimos que se los quiten, pero por lo menos si no construyeron nada preguntarle si van a construir o si no dárselo al que realmente lo necesite. Yo anduve hace dos semanas y vi solo dos casas y una gruta de la Virgen de Fátima que fue inaugurada recientemente.
-¿Viviendas, empleo…?
-En materia de viviendas es muy poco lo que hicieron después de la gestión de Claudio Poggi. Se entregaron unas 10 viviendas. A esas hay que sumar las que se inauguraron en el año 2016, pero que fueron construidas en el Gobierno de Claudio Poggi, pero se entregaron en los primeros meses del 2016. Ahora hay unas que están construyendo frente al hospital, pero esa obra quedó paralizada y nadie sabe por qué. Algunos dicen que fue porque no se certificó y otros dicen que no se normaliza la documentación
– Aspiras ser intendenta, ¿cuáles son las propuestas?
-Extracto: Si vamos a decir propuestas, son muchísimas porque uno ama Candelaria y uno que ha trabajado en el municipio sabe que son muchas las necesidades. Pero creo que antes de proponer, hay que hacer. Creo que uno se tiene que comprometer a trabajar por el vecino, trabajar para sacar a Candelaria de este estado de abandono que sufre.
-¿Y dónde podemos notar ese estado de abandono?
-Es un estado de abandono permanente. Si vas un día llámese lunes, martes, miércoles o jueves, o el viernes o sábado es igual. Ahí no se puede diferenciar un día hábil a uno que sea fin de semana. La única vez que la plaza tiene vida son los meses estivales o cuando nos preparamos para la Fiesta del Melón y después no hay vida. Y decimos “Uh a 20 kilómetros está Quines” y siempre renegamos que nos comparan con Quines, pero la verdad es que sí nos tenemos que comparar con ellos. Porque estamos solo a 20 kilómetros y allá siempre hay algo para hacer, entonces me preguntó ¿por qué nosotros no generamos algo para que el turista se quede en Candelaria?
Desde el municipio se puede hacer mucho, es muy amplia la actividad por hacer. Se puede generar una agenda de actividades desde el Área de Cultura, generar acciones o permitir que los mismos comerciantes de alrededor de la plaza organicen para que el turista y vecino pueda ir, disfrutar de la plaza o convocar a los artesanos para que le den vida a ese lugar. Es una plaza que ha sido remodelada hace tres años pero que no tiene vida.
Candelaria es una zona netamente agrícola. Quienes la conocen saben que es una zona donde se producen los más exquisitos melones, las mejores papas, aunque digan que es un producto surgido de Villa Dolores, pero las mejores se producen en tierras de Candelaria.
-Mencionaste la cuestión cultural, pero ¿qué más te interesa?
-Nosotros tenemos el corredor Quines-Candelaria donde se instalaron grandes empresas. Entonces, ¿por qué no generar con esos productores, con esas empresas contratos o convenios de contraprestación? Sería para generar trabajo para la gente de Candelaria. Hablo de un trabajo genuino. Nadie está en contra del Plan de Inclusión Social, pero en Candelaria necesitamos trabajo.
Sería bueno que nuestra gente tenga una mejor calidad de vida. Yo siempre soy una fiel defensora de que los chicos tienen que estudiar para tener una mejor calidad de vida, se merecen un mejor futuro. El otro día fui a una casa y había dos chicos, tienen la edad de mi hija, que se fueron a México en busca de progresar. Y yo decía “Qué lástima” porque Matías, así se llama uno de los chicos, tuvo que emigrar para tener oportunidades. Ellos me comentaron que no tenían nada para hacer en Candelaria y que se fueron a buscar un mejor futuro. “Me duele dejar a Candelaria, pero no hay otra”, me contestó ese chico.
Actualmente no hay oportunidades. Otro joven me dijo “Ves la municipalidad y siempre son los mismos”. Actualmente yo miro la biblioteca y no hay nada. Nosotros en el tiempo que yo estaba en la municipalidad creamos la Escuela Municipal de Arte, que era muy linda, muy amplia, funcionaban talleres de música, danza folclórica, inglés, ajedrez. Tuvimos unos muy buenos valores de ajedrez que fueron campeones provinciales y nacionales. En una oportunidad cuatro chicos nuestros ganaron viajes a España, a Inglaterra, a Francia. Teníamos muy buenos valores, pero esos chicos hoy no fueron aprovechados.
Uno es Emanuel y le pregunté si lo habían llamado desde la municipalidad y me dijo que no porque le argumentaron que él ya estaba contratado en la ULP. Y antes, en mi época, la municipalidad siempre lo contrataba para que diera talleres de ajedrez. Ahora eso se terminó.
O sea, la biblioteca, hoy no tiene vida. Es un edificio en el que vos entrás, yo entro los miércoles cuando tenemos sesión del Concejo, y no tiene vida.
-¿Cómo ven el futuro?
-Nosotros queremos un cambio. Los vecinos dicen que quieren un cambio y el domingo un chico me dijo “Me fui a San Luis a trabajar y voy a esperar hasta junio. Voy a volver a Candelaria para votar. Y si veo que sigue esta gestión, me quedo viviendo en San Luis y no vuelvo más a Candelaria”. Le pregunté por qué no volvería más y me dijo “porque este gobierno hace 30 años que está y no estoy dispuesto a seguir aguantando 4 años u 8 años más”. Es el cansancio de la gente y por eso quieren un cambio.
Mucha gente, los vecinos están esperanzados en que habrá un cambio. Puede que sea yo o no, pero es lo que quiere la gente.
-Se cansaron de un gobierno de familia…
– Exactamente. Estamos cansados de lo mismo. Lamentablemente la gente está enojada por la famosa Ley de Lemas y el tema de los sublemas. Ellos, desde el oficialismo armaron un sublema paralelo y todo eso para tratar de sumar más votos.
-¿Qué le decís a los vecinos?
-Primero que todo se perdió el miedo. Esta elección es totalmente distinta a las elecciones anteriores a cuando empecé con Avanzar. Porque en ese momento la gente estaba temerosa, te decía “Sí me gusta Claudio Poggi”, pero tenía miedo. Pero ahora noté que es distinto. Cuando inauguramos nuestra sede invité a la gente y pensaba “Ojalá que vengan” y me acompañaron 70 personas, en un pueblo chico. A pesar de que en la esquina se habían parado empleados municipales.
Yo alquilé la sede a media cuadra de la casa de mi padre y al lado habían ido unos empleados de la municipalidad, y ahí estaban con las cámaras filmando lo que pasaba en la inauguración nuestra. Por eso digo que, a pesar de eso, se perdió el miedo.
A los vecinos les digo que si ellos quieren un cambio se tienen que involucrar, que se tienen que animar y demostrar que si quieren ese cambio. Si no se animan a involucrarse ese cambio no se va a dar. Ellos me comentan que tenga fe porque en esta elección ganará el voto silencioso.
Yo espero no defraudar a esos vecinos. Ellos me comentan que tienen las esperanzas depositadas en mí. Y si la voluntad popular me lo permite, no voy a defraudar a la gente de Candelaria.
Mi compromiso es trabajar para todos, para que Candelaria siga creciendo.
Video: Víctor Albornoz – Edición: Juan Ledesma – Fotos: Marcos Verdullo